¿MARAVILLAS DE UN DIOS?

28 Nov

Al final “ Joya de maravillas espléndidas.”

“Contaba un gran soñador (Lewis Caroll)  “Alicia en el país de las maravillas”. Encontrar lo que esta frase encierra, total universo de majestuosidades que no conocemos y tal vez no lleguemos a conocer.

La vida, suceso extraño de comprender, pero por medio del cual podemos experimentar; el mundo antiguo, el mundo presente y el mundo futuro. Vía por la cual nos fascinamos de las bellas criaturas, de la belleza que nos impacta y nos llama a descubrir”.

Desde nuestro desconocido pasado y origen buscamos descubrir a nuestro progenitor. Buscar en las mínimas y dispersas pistas de la vida anterior ha sido la tarea y para esto México ha sido afortunado con una inmensa oportunidad: “Cuatrociénegas” ó “Bolsón”.

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Cuatrociénegas  se encuentra  en el desierto de Coahuila, se trata de pozas de agua que albergan los mismos tipos de microorganismos que habitaban la Tierra hace miles de millones de años. Se trata de un valiosísimo ecosistema para estudiar la vida primitiva. Habló (Arthur Conan Doyle) de un “Mundo perdido”.

Las temperaturas en este laboratorio de la evolución son extremas: pueden rebasar los 45°C en verano y caer bajo de los 0°C en invierno. Pese a la escasa lluvia el valle ha acumulado agua en abundancia, la cual aflora por centenares de pozas, alimentadas por manantiales que brotan del manto subterráneo. Su profundidad varía de un metro a más de 10 m, con diámetros que van de unos centímetros a más de 200 metros.

Por sus características geográficas, hidrológicas, orográficas, climáticas, físicas y químicas, Cuatrociénegas es hogar de formas únicas de vida en el planeta: 23 especies endémicas de plantas, 54 de animales. Esto nos es poca cosa porque significa que esas 77 especies –que incluyen anfibios y reptiles, 7 crustáceos, 8 peces, 9 moluscos, 1 especie de insecto y 4 de alacranes – solamente existe allí y en ningún otro sitio del mundo.

Este ecosistema es tan valioso, que muchos investigadores e incluso de la NASA han acudido al lugar para aprender sobre la evolución de la vida primitiva en el planeta y la posibilidad de vida en otros.

La doctora Valeria Souza, del Departamento de Ecología de la UNAM, encontró grupos microbianos que forman estromatolitos (comunidades complejas de microorganismos que se dividen en capas y producen carbonatos de calcio, por lo que se endurecen hasta adquirir un aspecto de piedra. Los estromatolitos son fósiles vivientes que datan desde unos 3800 millones de años.

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Cuatrociénegas guarda evidencias de dos acontecimientos importantes en la historia de la diversidad biológica en el mundo. El primero es el aumento de oxígeno en la atmósfera de la Tierra debido a la aparición de bacterias, hace unos 2400 millones de años. El segundo suceso crucial, fue que en ese lugar se abrió el zipper, la grieta que dividió Pangea.

“El universo se vuelve en un vital sentido de encrucijadas que procura la existencia y preexistencia de los mitos y leyendas. Cuando estos seres que representamos un grano de arena del más extenso mar de vida, no comprendemos nada de lo incomprensible comenzamos a creer en lo extraordinario de divina fuerza, creemos en deidades que no conocemos y en seres mitológicos que expliquen lo que descubrimos”.

México es un país con la más extensa diversidad en todos los sentidos y su ideología no es la excepción, este es el caso del pez “Regalecus”.

El Regalecus es un pez mesopelágico (vive en mar abierto, lejos del fondo aunque también lejos de la superficie, más o menos a un kilómetro de profundidad). Se desconocen muchos aspectos acerca de la vida de este pez, incluso aspectos tan básicos como su taxonomía. Por su boca y dientes pequeños se sabe que los Regalecus se alimentan de crustáceos del zooplancton.

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Este pez causó controversia por ser poco usual que se encontrara en Cozumel, porque la mayoría de los registros de Regalecus han tenido lugar en aguas templadas o frías. Por otro lado los varamientos de estos peces suelen ocurrir en marzo y junio, mientras que el espécimen encontrado en Cozumel fue observado a principios de febrero.   

En un caso de Zihuatanejo este pez causo gran impresión entre sus habitantes debido a sus características de ojos grandes como los de un búho, su boca y por las espinas que sobresalían de su cabeza. Esta impresión causo una reacción interesante, pues su habitantes y un encabezado en los periódicos nombró al Regalecus, “Cruza de tiburón y raya: monstruo marino nunca antes visto”, lo que recordaba un poco a las legendarias serpientes marinas gigantes. 

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La “madre naturaleza” es aquel nombre con el que en muchas ocasiones nombramos a nuestra progenitora y a ella le adjudicamos la construcción de los seres vivos incluyendo en ello las características que nos hacen especiales y auténticos y también aquellas que hacen que el ciclo de la vida preexista. Este es el caso de todos los seres vivos de los que tenemos conocimiento de su existencia.

Las flores son seres vivos que también poseen características que las hacen únicas y auténticas. Si nombramos sólo su color, podemos describir con romanticismo, goce y disfrute las sensaciones que nos proporcionan. Pero a mayores rasgos el color de las flores tiene un gran propósito.

El color de las flores ha evolucionado de acuerdo con la capacidad visual de las abejas. Las primeras flores probablemente eran blanquecinas. Las flores desarrollaron pigmentos para ser más visitadas por las abejas, teniendo como consecuencia una mejor distribución de polen, por lo tanto una reproducción satisfactoria.

La coloración de las flores se debe a tres diferentes pigmentos: clorofila, carotenoides y flavonoides. La aplicación de estos conocimientos por los floricultores ha hecho posible que puedas gozar de ellas en diferentes tonalidades.

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Sabemos que en cuanto a los animales como los mamíferos estas características han sido más estudiadas por ser más cercanos a nosotros. Algunos casos muy interesantes son las focas leopardo de la Antártida, las focas del mediterráneo, las focas monje de Hawai, la foca gris y los elefantes marinos.

Las focas leopardo de la Antártida, las focas del mediterráneo, las focas monje de Hawai, la foca gris y los elefantes marinos, son mamíferos marinos con cuerpo de torpedo (familia: pinípedos; subfamilia Phocidae). Su vida acuática ha exigido adaptaciones que a lo largo de millones de años han afectado su anatomía, fisiología y conducta.

Entre estas adaptaciones se encuentran:

  • Sus cuerpos en forma de proyectil, al transformar sus patas en aletas; tener los órganos sexuales retraídos, no tener orejas ni pestanas, para que al desplazarse en el agua lo hagan con menos gasto de energía.
  • Tienen ojos enormes con una córnea reforzada con queratina (proteína que forma capas externas de las uñas, pelo, pezuñas y cuernos). Tienen una lente casi esférica que les permite enfocar con precisión debajo del agua. Tiene una capa llamada tapetum lucidum que refleja la luz, por eso sus ojos tienen un aspecto metálico y parecen brillar en la noche. 

Quizá el precio por su gran adopción en el agua  ha sido que sean muy vulnerables en tierra ante sus depredadores. Incluyendo al hombre.

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“Todas las maravillas deben de ser valoradas y cuidadas, sin embargo el hombre insiste en su conducta irracional de destrucción”.

¡Cuida el país de las maravillas!

Guerrero Mothelet Verónica. «Cuatrociénegas- Laboratorio de la evolución.»  Schmitter-Soto Juan J. «Regalecus visita Cozumel.» Uruchurtu Gertrudis «Delirio de color.»¿Cómo ves? Año 9, No. 101. Revista de divulgación de la ciencia de la UNAM.

I.M. «A ojos vistas» ¿Cómo ves? Año 8, No. 95. Revista de divulgación de la ciencia de la UNAM.

Diana Herrera

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